Salsa ácida de arándanos
Una sabrosa salsa ácida de arándanos puede ser básicamente estupenda para sazonar cualquier receta agridulce, además de que también puede ser perfecta para complementar muchos postres, y el desayuno de cada mañana utilizándola como mermelada.
Hoy te enseñaré la preparación de ésta deliciosa salsa casera, y una suculenta receta realizada con frescos arándanos. Apuesto será la receta justa para todos aquellos que sí gusten experimentar con comidas agridulces, y todos aquellos que realmente disfruten las preparaciones con fruta fresca.
¡Manos a la obra!
Ingredientes:
- 4 tazas de arándanos frescos o congelados
- 1 taza de jugo de naranja
- 1 taza de azúcar
- ½ cucharadita de canela
- ½ cucharadita de pimienta de Jamaica
- ¼ cuharadita de nuez moscada molida
- Ralladura de una naranja
Preparación:
En una cacerola grande, añade los arándanos frescos, el zumo de naranja, y también azúcar. Revuelve constantemente a fuego moderado, hasta que los ingredientes lleguen a ebullición.
Después del primer paso, baja a fuego lento y revuelve hasta lograr que los arándanos y los demás ingredientes comiencen a espesar. Tardarán aproximadamente unos diez minutos después de la ebullición, y su consistencia final será realmente muy sólida.
Por último, no olvides añadir la canela, la pimienta, aunque ésta no es indispensable, y la nuez moscada. El primer y último ingrediente que les acabo de mencionar le otorgarán a la salsa un dejo básicamente sabroso, además de un aroma realmente fantástico.
Por último, puedes servir la salsa caliente con un rico pollo asado, o puedes refrigerar por dos semanas, si se la guarda en un recipiente hermético.
¡Intenta ésta receta! Es una verdadera exquisitez si te agrada disfrutar de recetas agridulces en tus comidas, o quizás degustar de un fuerte y consistente desayuno. Por lo demás, seguimos implementando arándanos en nuestro menú. Son muy saludables, además de que también son muy, pero muy sabrosos.
¿La intentamos?
¿Más recetas con arándanos? Te recomiendo también unas ricas galletas de arándanos para la merienda, una suculenta torta de arándanos a la taza, o unos tentadores muffins de arándanos.